¿Qué es y para qué se utiliza?
Salvacolina comprimidos es un antidiarreico derivado de la petidina. Actúa reduciendo el peristaltismo intestinal. Al disminuir el tránsito intestinal, favorece la absorción de agua y electrolitos, disminuyendo la frecuencia y cantidad de las deposiciones, y aumentando su viscosidad.
Se emplea para el tratamiento sintomático de los procesos diarreicos agudos o crónicos.
Para más información consulte el prospecto
¿Cómo utilizar?
La dosis recomendada de Salvacolina es:
- Adultos
- 2 cápsulas (4 mg) como dosis inicial seguida de 1 cápsula (2 mg) tras cada deposición diarreica.
- La dosis máxima para adultos es de 8 cápsulas (16 mg) al día.
- Niños mayores de 12 años
- 1 cápsula (2 mg) como dosis inicial seguida de 1 cápsula (2 mg) tras cada deposición diarreica.
- En niños la dosis máxima diaria debe relacionarse con el peso corporal:
Peso niño | Número máximo de cápsulas por día |
A partir de 27 kg | Máximo 4 cápsulas |
A partir de 34 kg | Máximo 5 cápsulas |
A partir de 40 kg | Máximo 6 cápsulas |
A partir de 47 kg | Máximo 7 cápsulas |
Composición
El principio activo de Salvacolina es: loperamida hidrocloruro 2 mg por comprimido.
Los demás componentes son: manitol (E-421), talco (E-553b), estearato magnésico (E-572), celulosa microcristalina (E-460i), croscarmelosa A, sílice coloidal (E-551), amarillo óxido de hierro (E-172).
Advertencias y Contraindicaciones
Se debe acudir al médico si una diarrea aguda persiste o empeora tras dos días de tratamiento.
No superar la dosis diaria recomendada.
Mantener fuera de la vista y del alcance de los niños.
No utilice este medicamento después de la fecha de caducidad que aparece en el envase. La fecha de caducidad es el último día del mes que se indica.
PRECAUCIONES RELATIVAS A EXCIPIENTES
- Este medicamento contiene lactosa. Los pacientes con INTOLERANCIA A LACTOSA hereditaria o galactosa, insuficiencia de lactasa de Lapp o malaabsorción de glucosa o galactosa, no deben tomar este medicamento.
La administración de loperamida a pacientes con diarrea no excluye la adecuada hidratación del paciente, por lo que se aconseja administrar líquidos como agua, infusiones o soluciones de rehidratación oral en las cantidades necesarias. Síntomas como sed, boca y piel seca o disminución del volumen de orina son claros signos de deshidratación.
No es aconsejable administrar loperamida a pacientes deshidratados antes de corregir la deshidratación.